Mientras la inflación no da tregua y el salario docente se hunde bajo la línea de pobreza, la última reunión paritaria entre el Gobierno de Santa Fe y los gremios del sector educativo terminó sin resultados y con un creciente malestar en las bases. En un nuevo encuentro que tuvo lugar este martes en la ciudad de Santa Fe, el Ejecutivo decidió no presentar ninguna propuesta salarial concreta, lo que desató la respuesta inmediata de AMSAFE, que se retiró del ámbito paritario e intimó formalmente al gobierno a actuar con urgencia.
La situación de los trabajadores de la educación es crítica. Muchos docentes, incluso con años de antigüedad, cobran sueldos que no alcanzan a cubrir ni siquiera la canasta básica alimentaria. Es decir, están por debajo de la línea de indigencia. Otros, apenas superan la línea de pobreza. Este deterioro del poder adquisitivo se arrastra desde hace tiempo y se agrava con cada mes que pasa sin una recomposición real.
Desde UDA, AMSAFE, SADOP, y AMET —los gremios que representan a la docencia pública y privada— venían con una expectativa clara al encuentro: obtener una propuesta seria que aborde no solo el tema salarial, sino también condiciones laborales, estabilidad, cuestiones previsionales y decisiones pedagógicas que, denuncian, se vienen tomando de manera unilateral. Pero en lugar de respuestas, el gobierno provincial volvió a pedir tiempo. La misma promesa de la semana pasada. Esta vez, sin fechas ni compromisos claros. Para los gremios, esto no solo representa una dilación, sino una forma de destrato hacia quienes sostienen cotidianamente el sistema educativo.
“Hace una semana nos dijeron que estaban trabajando en una propuesta. Hoy volvieron con las manos vacías. Mientras tanto, los docentes no llegan a fin de mes, y los jubilados esperan aumentos que no se pagan a tiempo”, manifestaron desde AMSAFE.
Uno de los puntos que más tensiona la situación es la imposición del presentismo, una herramienta que el gobierno utiliza como forma de disciplinamiento y que, en la práctica, limita el derecho a realizar medidas de fuerza. “Muchos compañeros y compañeras no pueden parar porque pierden una parte del sueldo que ya de por sí es miserable. El presentismo se convierte así en una mordaza encubierta”, denuncian desde los gremios.
Además del impacto salarial, los gremios advierten sobre el deterioro general de las condiciones en las escuelas y el creciente malestar en las aulas. “Se habla de diálogo, pero se imponen políticas pedagógicas sin participación, se pagan mal los haberes y se posterga a quienes se jubilaron después de una vida en el aula”, señalan.
Finalmente AMSAFE convoca a asambleas departamentales en toda la provincia para definir los pasos a seguir. “Esperamos que esas asambleas sirvan para analizar una propuesta concreta y que esté en línea con las necesidades que tenemos los trabajadores, tanto activos como jubilados”, afirmó Rodrigo Alonso, secretario general del gremio.