El Poder Judicial de Reconquista vuelve a estar en el ojo de la tormenta. Históricamente cuestionado por sus vínculos con la política y las sospechas de favorecer a los sectores de poder, en los últimos años la crisis institucional se profundizó y hoy genera cada vez más preocupación en la comunidad. La realidad es que, más allá de anuncios y cambios de nombres, la Justicia en Reconquista arrastra décadas de conflictos y desconfianza social. Los cargos siempre estuvieron bajo sospecha de cercanía con el poder político del departamento, lo que alimenta la percepción de parcialidad y falta de independencia.
En los últimos días, el Dr. Rolando Galfrascoli presentó su renuncia a la Subsecretaría de Persecución Penal de la Fiscalía Regional de la Cuarta Circunscripción. La noticia sorprendió en el ámbito judicial, aunque el propio funcionario aclaró que su salida es por motivos personales y que lo hace “por la puerta grande”, tras siete años de trabajo en Rosario, Santa Fe y Reconquista. Desde el 1 de septiembre asumirá como Director Provincial de Investigación Criminal, con alcance en el centro-norte santafesino.
Paralelamente, la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe ratificó la destitución de la exjueza de Familia Ileana Judit Sinchez, quien había sido separada del cargo en diciembre de 2023 por “ignorancia manifiesta del derecho” e incumplimiento reiterado de sus funciones. La magistrada había denunciado arbitrariedad en el proceso y falta de garantías, pero la Corte consideró que no presentó nuevos argumentos y confirmó su remoción.
Mientras tanto, el Colegio de Abogados de la Cuarta Circunscripción expresó su preocupación por la falta de jueces y defensores en el norte provincial. Sus representantes, el Dr. Roberto Baccarezza y el Dr. Rodrigo Santos Roberts, se reunieron días atrás con el gobernador Maximiliano Pullaro, quien anunció que en los próximos días se enviarán pliegos a la Legislatura para cubrir cargos vacantes. También se dispuso llamar a concurso para la creación de nuevos juzgados de familia, y se designará un juez subrogante en Reconquista para dar respuesta a la demanda urgente en esa materia.
Hoy, con renuncias, destituciones y despachos vacíos, el desafío es recuperar la credibilidad y garantizar que el servicio de justicia responda realmente a los ciudadanos, y no solo a los poderosos.
