Este jueves 10 de abril, la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) llevarán adelante un paro nacional en rechazo a las políticas económicas del gobierno nacional, que están provocando una profunda crisis social. Sorprende la decisión del Gobierno de la Provincia de Santa Fe, que anunció que descontará el día a los trabajadores estatales y docentes que adhieran al paro.
La medida de fuerza responde a la creciente preocupación por el aumento del desempleo, la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores y la crítica situación que atraviesan los jubilados nacionales. Los gremios alertan sobre un ajuste económico que profundiza la recesión y deja a miles de familias argentinas en la incertidumbre.
Uno de los principales reclamos es la urgente necesidad de paritarias libres, sin restricciones ni condicionamientos, en un contexto donde los salarios están siendo superados ampliamente por la inflación. “Estamos defendiendo los ingresos de los trabajadores, frente a un Estado que incluso se niega a homologar los acuerdos paritarios”, señalaron desde la CGT.
Además, la situación de los jubilados es alarmante. Con haberes que no cubren ni las necesidades básicas, este sector de la población está siendo empujado a niveles de pobreza que resultan inadmisibles en un país con recursos como la Argentina.
PULLARO DESCONTARÁ EL DÍA
En este marco de legítimos reclamos, sorprende la decisión del Gobierno de la Provincia de Santa Fe, que anunció que descontará el día a los trabajadores estatales y docentes que adhieran al paro. Esta postura se confirmó luego de reuniones entre ministros del Poder Ejecutivo provincial, quienes ratificaron que se activará el sistema de declaraciones juradas para quienes no se sumen a la medida, con el objetivo de aplicar descuentos y preservar el premio por asistencia perfecta.
“La prioridad es los chicos en la escuela y el Estado funcionando”, afirmaron desde la Casa Gris, justificando así una medida que desconoce el derecho constitucional a huelga y desoye el contexto nacional de crisis social y económica.
Desde los sindicatos sostienen que el paro del 10 de abril se inscribe en una serie de acciones que buscan frenar el ajuste y visibilizar el impacto real que las decisiones del gobierno nacional están teniendo sobre el pueblo trabajador.
