La Ciudad de Santa Fe avanza con un plan integral de obras hídricas que tienen como objetivo principal reforzar la seguridad frente a posibles inundaciones. Las intervenciones se concentran en sectores estratégicos como la Costanera, el Paseo de los Pescadores y el Dique 2 del Puerto, puntos clave para la protección de la capital provincial. Estas obras ya demandaron más de 10.700 millones de pesos en la capital y el área metropolitana. Tanto Provincia como Municipio coinciden en el objetivo central: dotar a Santa Fe de un sistema hídrico más seguro y moderno, capaz de dar tranquilidad a los vecinos frente a fenómenos climáticos cada vez más intensos.
Costanera y Paseo de los Pescadores
El Ministerio de Obras Públicas informó que, tras concluir las tareas de protección en la descarga del desagüe Pedro Zenteno, se proyecta la recomposición de un tramo de 600 metros del Paseo de los Pescadores, entre Maipú y Pedro Zenteno. Estas acciones apuntan a reforzar la defensa costera y a recuperar espacios emblemáticos de la ciudad.
Trabajos en el Dique 2 del Puerto
La Municipalidad lleva adelante la consolidación del talud del Dique 2, una zona afectada por erosiones producto del desagüe pluvial de calle La Rioja. Para estabilizar la estructura se utilizan recintos con bolsas de geotextil, rellenos bajo agua, bloques de hormigón y cobertura vegetal con geomanta. Esta obra busca prevenir futuros daños y fortalecer la descarga hacia el Dique 2, considerada una intervención estratégica para todo el sistema.
Recuperación de la Red Urbana de Drenaje
El Municipio también puso en marcha un plan intensivo de limpieza y mantenimiento de desagües. En los últimos 18 meses se retiraron más de 4.500 metros cúbicos de sedimentos, logrando que el 95% de las casi 6.000 bocas de tormenta estén operativas. Además, se rehabilitaron 200 kilómetros de entubados, 150 kilómetros de canales y 10.000 metros cúbicos de reservorios, tareas clave para mejorar la capacidad de escurrimiento durante lluvias intensas.
Refuerzo de Estaciones de Bombeo
En paralelo, la Provincia incorporó siete nuevos equipos de bombeo de 600 m³/h y gestiona la reparación de otros cinco. El Municipio también trabaja en la recuperación de unidades propias. En total, se contabilizan 23 equipos en proceso de reposición, reparación o reserva, lo que permitirá sostener la operatividad del sistema frente a tormentas y crecidas.