Desde distintos lugares de la Costa Santafesina se han comunicado manifestando su preocupación por la crecida del río Paraná y los múltiples afluentes que tienen influencia directa en nuestra provincia. Consultado al respecto, el Instituto Nacional del Agua informó que a pesar que en las últimas semanas se incremento el caudal del agua ingresada por el norte argentino, el mismo no alcanza para pronosticar futuras inundaciones importantes, previéndose que no se alcanzará los niveles de evacuación. También precisaron que todo dependerá, del comportamiento climático.
Efectivamente los vecinos de la Costa Santafesina, ven con preocupación la lenta, pero sostenida crecida de las aguas costeras, generando la lógica preocupación, asi es que desde hace varias semanas sobre la costa del Paraná se advierten caudales por encima de los habituales para la época. Si bien hace un par de días se registró un pico de crecida en Cataratas, y se cuadriplicó el caudal de agua –pasó de 1.500 a más de 6.000 metros cúbicos por segundo–, luego la situación en la zona volvió a normalizarse.
Por esa razón, se prevé que esos caudales extraordinarios pero acotados lleguen a la región en una semana, pero sin alcanzar o superar niveles de alerta o evacuación
La Situación Hidrológica , según el informe del Instituto Nacional del Agua, INA, es la siguiente:
Río Iguazú: Se destacan netamente las lluvias sobre toda la cuenca, con acumulados de hasta 150 mm sobre las nacientes del río. Estas lluvias tendrán como primer efecto la elevación de los niveles en los embalses emplazados en el tramo medio del río, los que quedarán sin capacidad alguna para atenuar los efectos de futuros eventos. No se espera un repunte en la próxima semana, pero no se descarta un evento significativo en las semanas subsiguientes.
Río Paraná desde Itaipú: Prácticamente sin lluvias sobre las nacientes y la parte regulada de la alta cuenca. Sobre la mitad sur de la alta cuenca se incrementó fuertemente la actividad. Las lluvias se concentraron mayormente sobre el este de esta región, alcanzando puntualmente unos 160 mm y afectando las altas cuencas de los afluentes Paranapanema, Ivaí y Piquirí. No se espera un aumento adicional. Los embalses de mayor capacidad en nacientes y afluentes Tieté y Paranapanema presentan niveles normales de operación, con acotada capacidad de amortiguación ante futuras lluvias.
Confluencia Paraná-Iguazú: La lectura de escala en Puerto Iguazú aumentó de 10,80 m el viernes 31/may a 14,40 m esta semana, estabilizándose. En mayo promedió 10,19 m (4,25 m por debajo del nivel promedio mensual desde 1994). Seguirá muy dependiente de las lluvias sobre la cuenca del río Iguazú. El pronóstico meteorológico semanal indica baja probabilidad de un repunte importante en los próximos días.
Tramo correntino-paraguayo del Paraná: Sin lluvias de importancia en la semana. El caudal entrante al embalse de Yacyretá promedió 11.130 m3/s (un 6% más), próximo al promedio mensual de los últimos 25 años. No se espera un cambio significativo en la próxima semana.
Río Paraguay en Cuenca Superior: Nuevamente escasas lluvias en la semana. Continúa desarrollándose la curva estacional de ascenso, con niveles próximos a los normales para esta época del año. No se espera que estas tendencias se modifiquen sensiblemente.
Río Paraguay en Cuenca Media: Lluvias que acumularon hasta 50 mm en el área próxima a la sección Asunción-Clorinda no alcanzaron para acentuar el pico de crecida. El tramo medio retomó ya el descenso, el que se acentuaría gradualmente en las próximas semanas.
Río Paraguay en Cuenca Inferior: Sin lluvias significativas en la semana. El caudal entrante al tramo inferior del río Paraguay quedó estabilizado en unos 9.200 m3/s. Los niveles en todo el tramo inferior se han estabilizado, quedando muy dependientes de las lluvias que puedan registrarse sobre las áreas inundadas. El pronóstico meteorológico permite esperar que no se produzcan montos significativos.
Río Paraná en territorio argentino: Otra semana con lluvias poco significativas. El caudal que ingresa al tramo continúa por encima del valor normal, sin tendencia. Los niveles se mantuvieron sin tendencia definida. En Goya el nivel promedió en mayo 4,93 m (0,77 m por encima del promedio de junio desde 1994). En Santa Fe, el nivel registró un ascenso promedio de 0,15 m, quedando estabilizado en 4,62 m.
