Desde la Federación de Trabajadores Municipales de la Provincia de Santa Fe, reiteraron al Gobierno Provincial y a la propia Obra Social -IAPOS- que se instrumenten los mecanismos que garanticen la vacunación a los Trabajadores Municipales y Comunales, que declarados Esenciales desde el inicio de la Pandemia, aún continúan prestando servicios en sectores de alto riesgo de contagio.
Este proceso frente al COVID 19 tiene diversas características debido a la multiplicidad de tareas que ejercen los trabajadores, como recolectores de residuos, los inspectores y guardias en general, la atención al público y quienes en gran número realizan tareas de calle. Esto viene produciendo un contagio verificado por goteo, y debido a la vastedad del territorio santafesino y sus 365 Municipios y Comunas, adquiere una dimensión enorme, en donde ya hay muchas dependencias cerradas o reducidas al máximo sus posibilidades de trabajo y esto lo saben de forma directa los Intendentes y Presidentes Comunales de toda la Provincia.
La muerte de nuestro compañero Carlos Schweizer, inspector de la Municipalidad de Santo Tomé y sus padres -también uno de ellos periodista y empleado del Gobierno Provincial- pudieron haberse evitado.
La base de datos y la propia estructura del IAPOS -que contiene a todos los trabajadores esenciales del Sector Público Provincial y Municipal- NO fue utilizada para asegurar la vacunación de los sectores de riesgo, ni a los trabajadores y trabajadoras públicos con comorbilidades debidamente empadronados por la Obra Social. Hay que destacar que las ART brillan por su ausencia en la prevención y en la atención de las enfermedades laborales en esta emergencia sanitaria, embolsando fortunas en esta Pandemia.
Así mismo, FESTRAM exige una urgente atención de los Hospitales y Centros de Atención de Salud Municipal, que se encuentran en estado crítico, con alto nivel de ausentismo por contagios y saturación del personal que se mantiene cumpliendo las prestaciones sanitarias, tal como lo manifestaron en sus protestas los trabajadores y trabajadoras del Hospital de Niños de Rosario. Esta situación es reconocida entre funcionarios y titulares de los ejecutivos municipales, que como la Intendenta de Santo Tomé Daniela Questa, han reclamado la vacunación a los trabajadores de esa administración.
Se tomó una muestra testigo que incluyó a 20 Sindicatos de los 43 adheridos a FESTRAM, con un universo de 27 mil trabajadores, de un total de 45.000 en toda la Provincia. Los empleados municipales y comunales contagiados se incrementaron en un 350% en el período de que va desde Octubre del 2020 a Mayo de 2021. Con esta encuesta se estima en más de 1000 los trabajadores y trabajadoras de Municipios y Comunas que contrajeron COVID en sus lugares de trabajo desde el inicio de la Pandemia. Las muertes por COVID como consecuencia de la actividad laboral se acrecentaron en un 100% y la incidencia de contagio en el ámbito laboral es del 30%. Es decir que de cada 10 empleados, 3 trabajadores municipales se contagian en la realización de sus tareas como personal esencial.
A este escenario se suma la política de exprofeso de los sectores de Juntos por el Cambio, que con actos de intimidación, amenazas y despidos pretenden hacer su política partidaria sobre la base de la muerte de ciudadanos y trabajadores. Tal como la repudiable actitud de despidos en la Municipalidad de San Carlos Centro hacia agentes municipales que están amparados por los Decretos Presidenciales, o concejales (Rosario) que no dudan en reclamar la reducción de personal de la salud municipal, para provocar reacciones sociales.
Ante estos hechos y hasta tanto el Estado Provincial y sus Municipios no garanticen las vacunación a los sectores laborales en riesgo de contraer COVID, desde FESTRAM se instará a la aplicación de Ley Provincial 12.913 de Comité de Salud y Seguridad para que estos evalúen los riesgo y en tal caso ordenen la paralización inmediata de las tareas.