El río Paraná y sus principales afluentes, como el río San Javier, han registrado fluctuaciones significativas en sus niveles desde finales de 2024, pero la tendencia al descenso preocupa a la Prefectura Naval Argentina y a las comunidades costeras. Según el Instituto Nacional del Agua (INA), en los próximos tres meses, los niveles continuarán bajando, lo que genera incertidumbre sobre las actividades económicas relacionadas con la pesca y el turismo en la región.
A principios de diciembre de 2024, se registró un aumento significativo en el caudal de agua proveniente del noreste argentino, elevando los niveles del Paraná. En diciembre, el río subió casi dos metros, pasando de 1,70 metros a 3,28 metros en el puerto de Santa Fe. Sin embargo, esta tendencia se revirtió con el inicio de 2025.
El 1 de enero, el nivel del río era de 3,10 metros, pero ya al día siguiente bajó a 2,96 metros. Para el 4 de enero, el hidrómetro en Santa Fe marcó 2,90 metros, y sigue en descenso, según registros de la Prefectura Naval Argentina.
PRONÓSTICOS DEL INA
El Instituto Nacional del Agua proyecta que la tendencia a la baja persistirá en los próximos meses. Para el 14 de enero, se espera que el nivel del río en Santa Fe descienda a 2,00 metros. En Rosario, donde el nivel actual es de 2,51 metros, se anticipa una disminución a 2,41 metros y a 1,81 metros para el 14.
El INA explica que estos valores son estimaciones diarias promedio y advierte que las aguas se mantendrán en niveles medios bajos en las secciones superiores y en niveles medios hacia bajos en las inferiores.
LLUVIAS EN EL PRIMER TRIMESTRE
El Servicio Meteorológico Nacional, en su “Pronóstico Climático Trimestral”, advierte que las lluvias para enero, febrero y marzo serán normales o inferiores a lo habitual en la Costa Santafesina. Esta situación está influida por la ausencia de señales claras de fenómenos climáticos como El Niño o La Niña, lo que genera mayor variabilidad en las precipitaciones.
Aunque podrían ocurrir episodios de lluvias intensas en áreas específicas, la perspectiva general es de escasas precipitaciones, lo que podría agudizar los problemas relacionados con la bajante del río.
IMPACTO EN LOS PUERTOS DE LA COSTA SANTAFESINA
El descenso del río afecta directamente las actividades en los puertos de la región, donde la navegación y la logística se ven comprometidas. Además, las comunidades costeras enfrentan el riesgo de un suministro insuficiente de agua potable, una situación que ya se vivió durante meses de poca agua en 2024.
CONCLUSIÓN
El panorama para los próximos meses genera preocupación entre autoridades y habitantes de la región. La Prefectura Naval Argentina sigue monitoreando los niveles del río, mientras que las comunidades costeras enfrentan el desafío de adaptarse a una situación que podría prolongarse.