La Comuna de Arroyo Leyes Junto a la Subcomisión de Cultura invita a los vecinos y a toda la comunidad en general, al acto en Conmemoración de los 168 años del Fallecimiento del “General Don José de San Martín”, Padre de la Patria.
En esta oportunidad, el magno evento se realizará el día viernes 17 de Agosto a partir de las 14:30 hrs., en la Plaza que lleva su mismo nombre, ubicada en la Ruta provincial N° 1 km 12, 400, cien metros al este (Calle 26). Cabe destacar que este acto, año tras año congrega a las instituciones gubernamentales e intermedias de la pujante localidad de Arroyo Leyes, y esta ceremonia se ha convertido en un momento importante ya que la misma da lugar a unirse, pero fundamentalmente a dialogar entre los vecinos y reflexionar donde están y hacia donde quiere ir, inspirados en valorar la vigencia del ideario sanmartiniano en el proyecto de unidad nacional y latinoamericana.
San Martín Padre de la Patria
En Roma, los vecinos romanos, denominaba como “Padres de la Patria” a aquellos ciudadanos venerables y respetados que hacían grande y magnifica a su Tierra, y San Martin fue eso, un líder heroico de la Patria de la naciente Argentina.
Además de su titánica tarea libertadora de Argentina, Chile y Perú, San Martín debe su lugar como “padre de la patria” a una percepción que nunca abandonó: la de no participar de las guerras internas del país. Fue el guerrero de la soberanía nacional, vivió obsesionado por expulsar al tirano de América y por mantener su sable limpio de sangre criolla. Todas las estatuas que lo recuerdan lucen inmaculadas, indiscutidas por esa decisión.
Desde el gobierno de Buenos Aires, se le ordenó que suspenda la campaña libertadora y regrese al territorio nacional, para poner el Ejército Libertador al servicio de las facciones internas que se desangraban por el poder y le solucione a la ciudad puerto los problemas que tenian con el federalismo del litoral. Aquí, el San Martín soldado, desobedece. Su espada no se desenvaina en luchas internas. De esta forma, continúa la campaña libertadora. Se encuentra con Bolívar y ahí chocan un militar político y un militar profesional. Sabe que el ejército libertador quedará en buenas manos; su condición de militar no político le dice que debe retirarse, ya que nada más ambiciona. Es interesante ver cómo la ausencia de metas políticas le entrega a San Martín esa pureza que lo dignifica de manchar su honor guerrero en partidismos y ambiciones que otros tuvieron y padecieron. San Martín es el guerrero que llega, libra la batalla y se va. Para quedarse hubiera necesitado ser un político, algo que jamás fue.
