El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó que la pobreza llegó a 36,5 por ciento y alcanzó a 17,3 millones de argentinos en el primer semestre de este año 2022. En tanto, el nivel de indigencia fue del 8,8 por ciento en los primeros seis meses del año. Los indicadores sociales principales mostraron una sensible mejora respecto al 42% de pobreza que marcó el 2020. En tanto, en el primer semestre del 2021, la pobreza ascendió al 40,6% y la indigencia al 10,7 por ciento.
Como comparación a nivel nacional, hacia fines de 2019, el último índice sin incidencia de la crisis sanitaria, mostró una pobreza de 35,5% de pobreza y un 8% de indigencia. En el peor momento de la pandemia, la pobreza llegó a tocar un pico de 42%, mientras que la indigencia tuvo su punto más alto en el primer semestre del 2021, con 10,7 por ciento.
En cuanto a los datos de la provincia de Santa Fe, registró un 39,1%, mientras que en el Área Metropolitana, que incluye entre otras localidades a La Capital, Rincón y Arroyo Leyes, hay 211.950 personas pobres entre las que se encuentran 42.229 bajo la línea de indigencia.
Otros de los datos que surgen del informe dado a conocer por el INDEC es que en Santa Fe aumentó su índice de pobreza, pasando de un 38,6% al 39,1% actual, ubicándose en el puesto Nº 8 entre los principales aglomerados del país. También se puede leer el alarmante aumento de las canastas alimentarias. Durante agosto, una familia tipo (4 personas) integrada por dos adultos y dos menores necesitó percibir ingresos por $60.857 para adquirir la cantidad mínima de alimentos y no caer en la indigencia, además de la necesidad de percibir ingresos por $120.000 para no caer debajo de la línea de la pobreza.